Con permiso es el segundo libro escrito por Marcos Vidal, reconocido adorador español y pastor de la iglesia Salem. Este curioso título se puede parafrasear de manera clara como: “Con permiso, hay algo que quiero decir, ¿me permiten?”. El autor expresa su propósito al escribir este libro al decir:
“Básicamente, lo que yo presento en el libro es un error que yo he cometido toda mi vida: confundir principios y formas. Tomar principios y rebajarlos al nivel de formas, tomar formas y elevarlas al nivel de principios”.
Y, ¿qué es lo que quiere decir?
Con permiso es una recopilación de escritos personales que el autor ha hecho durante unos 2 años, reunidos bajo este tema principal de “Se rebajan principios y se elevan formas”. Cuenta con 24 capítulos muy bien organizados y separados en 2 grupos:
- Parte 1: La teoría de los dos errores (Capítulos 1 al 5)
- Parte 2: En la práctica (Capítulos 6-24)
Este es un libro con lenguaje sencillo, cercano y muy honesto. Se valora y agradece que el autor hable todo en primera persona, dando su testimonio e incluso confesando ciertos pecados. Por ejemplo, en el capítulo 1 se puede leer:
“Desde luego, tengo aún mucho que aprender, pero me doy cuenta de que a lo largo de mi ministerio, tratando de servir al Señor Jesucristo con integridad de corazón, he llegado a cometer los mismos errores de manera constante y sistemática” (2).
En los distintos capítulos se tocan temas muy variados, entre ellos:
- “Aislamiento”, que habla de lo antibíblico que es para un cristiano aislarse del Cuerpo de Cristo y del peligro que ello conlleva.
- “Prosperidad” trata el tema del mal llamado “evangelio” de la prosperidad.
- “Evangelismo” habla de cómo los distintos contextos sociales y culturales pueden hacer que debamos cambiar la “forma” de predicar el evangelio, pero que nunca debemos cambiar el evangelio mismo, que es el principio fundamental.
- “Tolerancia” trata el tan actual tema de la tolerancia, que es muy sobrevalorado el día de hoy, pero que en gran medida va en contra de las Escrituras.
Analizando el contenido
Una fortaleza de este libro es la inclusión de diversos pasajes bíblicos en cada tema y capítulo. Al hacerlo, el autor pasa de la opinión personal a que sea la misma Biblia quien pueda hablarnos. En el énfasis que el autor hace en las Escrituras se puede apreciar un conocimiento y dominio de la Palabra de Dios.
De igual manera, la obra hace un importante énfasis en el evangelio de Cristo. Me dio mucho gozo leer una y otra vez que lo más importante es predicar el verdadero evangelio. En el capítulo 2 nos dice: “Hay ciertas cosas que se predican en la iglesia como si fueran evangelio, sin serlo”(7), para más adelante en el capítulo 3, sin ser un tratado teológico, hablarnos de la inmutabilidad de Dios y de la mutabilidad de todo lo demás, para concluir diciendo: “El evangelio no cambiará nunca” (16). Amén a eso.
De manera personal, debido a la excelencia musical del autor, hubiera deseado que se tratara un poco más el tema de la música y la adoración. Aunque se menciona brevemente en el capítulo 8, hubiera esperado un mayor énfasis o al menos un capítulo dedicado específicamente al tema de la música y el estilo musical, con respecto a elevar las formas y rebajar los principios. Igual, y sin querer ser quisquilloso, entiendo que algunos ejemplos que el autor usa pueden traer más ruido que claridad, específicamente la apreciación que hace de lo que ocurrió con la Catedral de Cristal (101) y su apoyo a la filosofía de ministerios de Rick Warren (128). De seguro como a mí, muchos otros tendrán sus reservas con las apreciaciones sobre estos dos ministerios, y entiendo que estos ejemplos no ayudan a avanzar la tesis de sus respectivos capítulos.
Conclusión
Mi lectura de Con permiso ha sido una grata sorpresa. A través de diversas parte de esta obra, el Señor me ha ministrado y he llegado a convicción de pecado. Es un libro de lectura rápida, sencilla, lleno de pasajes bíblicos que dan contexto y verdad a lo que nos quiere presentar el autor. Marcos Vidal ha escrito un buen libro que vale la pena leer y meditar para procurar no confundir los principios de nuestra fe con las diversas formas en que se pueden manifestar.
Fuente:thegospelcoalition.org
Daniel es Director del Ministerio Siervo Fiel y parte del grupo de adoración de la Iglesia Bautista El Faro, en Chile. Es ingeniero en informática de profesión, y está felizmente casado con Ana María, con quien tiene 2 pequeños hijos, Lucas y Amanda.
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