Los Secretos que Destruyen a las Familias y Cómo Resolverlos

   

Por: Marcel Pontón

Ella viajó con su familia a Europa por 6 meses ese año. Cuando regresaron todos al país, vinieron con una sorpresa gigante. Los padres, ya mayores de edad, regresaban con una nueva hija. Esa hija creció en un mundo privilegiado con sobrinos mayores en edad que ella, y con esa hermana solterona que realmente la crió.  Un día la madre ya muy anciana sabía que su hora llegaría pronto. Allí le reveló a la hija privilegiada que su verdadera madre era la “hermana solterona”, que había fallecido hace unos años atrás. Los secretos se mantuvieron por casi 20 años, a costa de un ambiente muy tenso en esa familia.

Todas las familias tienen secretos. Existen varios temas de los secretos, incluyendo la infidelidad, la ilegitimidad, relaciones previas, tipo de trabajo, el aborto, la adopción, el origen o estado de las finanzas, y a veces los encarcelamientos, o la enfermedad mental. Pero hay muchos otros tipos de secretos familiares. Un secreto dañino ocurre cuando un miembro de la familia le prohíbe a otro hablar sobre la realidad de tal o cual asunto por cualquier motivo. “Ni se te ocurra decir…”

Sea cual fuere la naturaleza del secreto familiar, el mantenerlo siempre afecta la familia. Los secretos:

1. Distorsionan la percepción de la realidad. Los que mantienen el secreto al igual que los que no saben la realidad alterna, viven una mentira. Cuando se conozca la verdad, el sentido de traición y dolor de quienes se enteren causará estragos muy grandes.
2. Dividen a la familia. Esta es la función principal de un secreto. Los que lo conocen se comunican entre sí a un nivel de “confianza”, mientras que quienes lo ignoran no pueden “entrar en el grupo”.
3. Crean conexiones falsas y superficiales entre quienes conocen el secreto, mientras que los aísla de manera innecesaria de quienes lo ignoran. Es decir, que crea triángulos muy rígidos.[i]
4. Intensifican la tensión y los problemas en la familia. Una familia con secretos vive angustiada con la idea de que alguien que “no debe” se puede enterar o ya lo sabe. Claro, también existe la posibilidad de chantaje de quienes lo saben.

¿Cómo podemos resolver el problema de los secretos familiares?

Una salvedad importante: no estamos hablando de sabotear la confidencialidad ni privacidad de otra persona. Hay secretos necesarios en una familia. La contraseña del cajero automático es uno de ellos, otro es información privada emocional que solo una pareja puede compartir.  Aquí estoy hablando de los secretos tóxicos que requieren complicidad para mantenerlos. Estas son estrategias prácticas:

1. Reconociendo que la idea de “proteger” los sentimientos de los demás, es una excusa para proteger mis propios sentimientos. Yo soy el que está aprehensivo o avergonzado acerca de cómo reaccionarían ellos ante la realidad. La gente siempre prefiere la realidad al engaño.
2. Saliéndome del triángulo o alianza falsa con la otra persona que quiere mantener el secreto.
   • Si el secreto involucra las acciones de terceros, debo reconocer que no soy responsable por las consecuencias de su conducta. Si ellos quieren mantener un secreto, no pueden contar con mi silencio.
   • Si el secreto es por mi conducta, puedo pasar por un proceso de pedir perdón y de restauración en cuanto sea posible. Pero siempre soy transparente. Esto me da fortaleza.
   • Si el secreto ha creado bandos en la familia (los que quieren mantenerlo contra quienes quieren divulgarlo), la patología familiar ha aumentado y está cobrando un precio muy caro. ¿Qué tiene mas valor, mantener el secreto o la familia?
   • En vez de buscar complicidad para mantener el secreto, busco apoyo de todos mis familiares para enfrentar la verdad.
3. Escribiendo una carta.  Solo describirlo, le quita el poder al secreto.  La carta la escribes para ti mismo, incluyendo lo siguiente:
   • Describe la situación y los protagonistas del evento.
   • Responde:
     • ¿Por qué me avergüenza tanto esto?
     • ¿De quién fue la idea de mantener el secreto?
     • ¿A quién quiero proteger?
     • ¿Cómo ha afectado este secreto a mi familia?
     • ¿Qué es lo peor que puede suceder si la gente conoce la verdad?
     • ¿Con quién y cómo debo hablar para eliminar este secreto?

4. Declarando la verdad. Si el secreto te hace vulnerable al chantaje, a la angustia, al miedo y a la incertidumbre constante, la verdad te hace libre. Este es un principio espiritual y también psicológico.

¿De cuál secreto te quieres librar?

Marcel Pontón

Neuropsicólogo clínico con amplia experiencia en el área de trauma, conferencista internacional, autor, profesor, padre y esposo, orientado a la integración de la espiritualidad con principios psicológicos que generan cambio.

Fuente: zonavertical.com