miércoles, 22 de junio de 2016

MANADA PEQUEÑA, ¡NO TEMAS!



Por: Nadia Aguilar


No temáis, manada pequeña, porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino. Lucas 12:32
En la Biblia está escrito 365 veces NO TEMAS, uno para cada día. Como seres humanos y que vivimos aún en la carne, los temores viene cuando se trata de tener que enfrentar alguna dificultad como una enfermedad, división familiar, un divorcio, alguna fractura de alguna relación de amistad o problemas financieros.
Nuestro Padre celestial se complace.
La expresión “ha placido” según el diccionario significa, “estar complacido” o que “le parece bueno”, es decir, Dios se goza en bendecirnos y lo hace con total libertad y abundancia porque nos ama.
Confrontar las diversas situaciones que se nos presentan en la vida y que nos parecen imposibles de solucionar por nosotros mismos, nos causan inseguridad, sin embargo cuando sabemos que tenemos un Padre que nos ama y que con ternura nos dice,  NO ESTÁS SOLO, y ¡no sólo eso! Sino que encima nos promete darnos Su Reino, conocer y creer esa verdad hará que la ansiedad y preocupación se vayan.
Seguramente pensarás, pero, ¡somos muchos en esta tierra!, y así es, pero una gran verdad, es que esos muchos se sienten solos, y Dios lo sabe, tan es así que nos llama “manada pequeña”. Por consiguiente, todos aquellos que siguen al Cordero a donde quiera que Él va y que están dispuestos a ser pastoreados por Él, serán una “manada pequeña”.
El poder de un reino es hereditario.
Jesús nos dio a conocer el amor del Padre a través de Él, no sólo nos vino a rescatar del mundo, sino que nos sacó de ahí para darnos una nueva ciudadanía en los cielos más que como siervos, como hijos y así heredar juntamente con Él todas sus riquezas en gloria.
Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. Romanos 8:17
Dios nos ama.
¡Es maravilloso saber cuánto nos ama el Padre! Depositar nuestra confianza en Dios a pesar de las adversidades, nos dará una visión distinta de lo que está sucediendo, y el Espíritu Santo nos dará la fortaleza espiritual, emocional y física que necesitamos para poder descansar en la promesa de que en Dios estamos seguros y que nada de lo que suceda podrá apartarnos de su amor, ni de su protección, pues Él ha prometido estar con nosotros todos los días.
Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén. Mateo 28:20
¡No temas! Mantente cerca de Dios y pídele que esta verdad sea revelada a tu vida para que puedas sentir la paz, el amor y el descanso que tanto necesitas.

Fuente: tecnoiglesia.com

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