He visto a Dios pasar por el extremo de mi telescopio

Por: Julio César Barreto

Friedrich Herschel, fue un astrónomo y músico Germano-Británico. Nació el 15 de Noviembre de 1738 en Hannover, Alemania. Este científico nos abrió el camino hacia las profundidades insondables. Rompió lo que llamaríamos la "esfera de las estrellas". Sorprendió a los de su época declarandole al mundo que la Vía Láctea formaba un Universo o sistema estelar integrado por millones de astros, a distancias infinitamente superiores de lo que se creía hasta entonces.

Instaló un telescopio en Slough (Bershire) con un espejo de 1,22 m y una distancia focal de 12,2 m. Descubrió dos satélites de Urano y los satélites sexto y séptimo de Saturno. Estudió el período de rotación de muchos planetas y el movimiento de las estrellas dobles, de las que catalogó más de 800. Analizó las nebulosas, aportando informaciones sobre su constitución y aumentando el número de nebulosas observadas aproximadamente de 100 a 2.500. Herschel fue el primero en formular que estas nebulosas estaban compuestas de estrellas.

Actualmente sabemos que la Vía Láctea es tan sólo una de las galaxias, o grupos de estrellas del Universo, y que si la vemos tan extendida de una parte a otra del firmamento es porque se halla tan sólo a la distancia de 400.000 años luz. ¿Qué es un año luz? Es la distancia que recorre la luz en un año viajando a casi 300.000 metros por segundo (299.792.458 m.s.). 

Sin embargo, a pesar de discurrir las estrellas por la inmensidad del espacio a tan enormes distancias, lo hacen con tal precisión que los cientificos pueden determinar con años y hasta siglos de anticipo, el sitio en que un astro se encontrará tal día y a tal hora. De este modo les es posible predecir los eclipses, el paso de un cometa. Ante tanta majestuosidad que hay en el Universo, se puede entender perfectamente el asombro de David cuando exclamó: "Cuando contemplo el cielo, y la Luna y las Estrellas que tú mismo hiciste, no puedo menos que pensar: ¿Qué somos los mortales para que pienses en nosotros? Y nos tomes en cuenta" (Salmo 8: 3-4).

También es completamente entendible la declaración del eminente científico Isaac Newton, cuando extasiado por la prodigiosa armonía de los cielos, declarara: "He visto a Dios pasar por el extremo de mi telescopio". 

Fuente consultada: Pruebas tangibles de la existencia de Dios (Samuel Vila)